En este nuevo Relato de Cooltura reflexionaremos sobre la importancia de tener claridad en los roles y en las herramientas que necesitamos para cumplir los retos.
El leñador es un reflejo de un comportamiento que vemos siempre en las organizaciones: hacer, hacer y seguir haciendo.
Pocas veces nos detenemos a evaluar si las herramientas, capacidad e incluso, equipo que tenemos, son lo necesario para cumplir con nuestras obligaciones.
Un ejemplo común es lo que vemos con la transformación digital: hablamos de este tema como si solo hiciera referencia a la tecnología y las empresas invierten millones de pesos en tecnología de última generación para ser «empresas más ágiles», sin embargo, a pesar de todos los esfuerzos no se ven los resultados.
¿Por qué? porque estamos ocupados cortando árboles (en este caso comprando tecnología) en vez de enfocarnos en afilar el hacha (entrenar a los equipos, desarrollar capacidades, innovar desde el talento, etc..).
Recordemos que nuestro desempeño siempre dependerá de nuestra preparación y nuestra preparación dependerá de nuestra apertura mental.
La invitación es a reflexionar sobre esos aspectos de la vida en los cuales debemos afilar el hacha y ser conscientes que por más expertos que seamos, sin las herramientas necesarias no llegaremos a ningún lado.
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