La Transformación Digital ha generado la disrupción digital y obliga a reformular la estrategia y abordar la redefinición de sus dimensiones clave: cultura, experiencia de cliente, talento, tecnología, procesos e innovación.
Los dilemas que se le presentan a los innovadores pueden ser resueltos, pero se debe crear un contexto en el cual la capacidad de desarrollo y valor de la organización se hallen lo suficientemente alineados con el poder de los clientes».
“La quinta disciplina” se centra en la resolución de problemas grupales utilizando el método de pensamiento sistémico para convertir a las compañías en “organizaciones de aprendizajes”